Misión de Tierradento - Colombia. Cue'sh quiwe - nuestra tierra

Misión de Tierradentro - Colombia

"cue'sh quiwe - nuestra tierra"

Jorge Luis Rodríguez, C.M.

Provincia de Colombia

Hablar de Tierradentro es hablar de una de las misiones más queridas y significativas por los misioneros vicentinos de la provincia de Colombia. Al entrar por primera vez a este territorio, se tiene la sensación de estar ingresando a lo más profundo de la tierra, a esto precisamente debe su nombre. Las grandes montañas que emergen a lado y lado del río Páez se asemejan a gigantes que custodian un tesoro de cultura, historia y leyendas.

Es una región donde contrasta la pobreza material con la riqueza humana, el pasado marcado por el dolor con los esfuerzos de una gente por realizar un futuro de prosperidad, y la influencia de la "modernidad" traída por los colonos con la cultura autóctona que aportan cada una de las etnias que habitan la región: los indígenas paeces, la población negra, traídos por los colonizadores para la explotación de sal; y los mestizos venidos de muchas partes del país buscado fortuna.

Sus habitantes han sufrido en el transcurso de la historia el olvido, el abandono, la violencia y la destrucción. La colonización del "hombre blanco" que arrasaba con todo; posteriormente, la violencia desatada por la guerrilla; y luego la misma naturaleza que se ensaña contra la gente. En 1994, un terremoto y una posterior avalancha de lodo y piedra producida por el río Páez. Un habitante de la región al relatar lo que para él significó la avalancha, describe el horror de lo que para muchos solamente puede parecer un fenómeno físico similar a otro, nos diría: "Para nosotros la avalancha no fue un simple fenómeno físico en el que las aguas y derrumbes descendieron por una inclinación topográfica. No. Para nosotros la avalancha fue un ser inteligente, quizás una serpiente gigantesca con cresta por cabeza, tal vez un dragón pavoroso con jinete capaz de marcarle a su antojo el rumbo destructivo, en todo caso un animal".

A pesar del dolor dejado por el terremoto-avalancha, el pueblo de Tierradentro renace con la esperanza de recuperar lo perdido desde los escombros. Las graves consecuencias de tipo ambiental y cultural, han hecho difícil la reconstrucción; gran parte de la población indígena fue reubicada en otros sectores fuera de la región, en detrimento de la propia cultura por la influencia de otras culturas.

Desde hace 77 años, la presencia misionera vicentina en la región ha buscado responder a esta compleja realidad fundamentando el trabajo pastoral en el conocimiento y acercamiento a la vida, la cultura, los problemas de los habitantes, la promoción humana y la inculturación de la fe. Concretando esta labor en cinco aspectos de la evangelización: el trabajo con los laicos, la pastoral vocacional, la educación y cultura, la pastoral indígena, la pastoral social y de los medios de comunicación.

Los laicos son una fuerza dentro de la Iglesia, Tierradentro no es la excepción. Las grandes distancias entre una comunidad y otra dificulta la visita constante, sobre todo los domingos, para la celebración de la misa por parte de los misioneros. Por esto, cada comunidad junto con el párroco, nombra un representante llamado "Animador de la Palabra" que los domingos se encarga de la celebración de la Palabra de Dios, en ausencia de la misa; además son los responsables de animar espiritualmente las comunidades junto con los Catequistas, que a su vez tienen el compromiso de la preparación para los sacramentos. Tanto los Catequistas como los Animadores de la Palabra, reciben formación periódica por parte del Centro de Catequesis de la Prefectura, a cargo de un equipo conformado por un misionero vicentino, un grupo de Hijas de la Caridad y algunos laicos, destinado exclusivamente a elaborar los talleres de formación en catequesis, Biblia, liturgia y formación cristiana, a asesorar a los párrocos en su trabajo pastoral y acompañar a los laicos en el compromiso que han adquirido con sus comunidades.

En la actualidad la Prefectura se encuentra divida en 12 parroquias: Calderas, Togoima, Vitoncó, Caloto, Belalcázar , Ricaurte, Pedregal, San Luis, Inzá, Turminá, Itaibe y Río Chiquito, ubicadas en las diversas zonas y entre las diferentes etnias, a cargo de los misioneros vicentinos y por sacerdotes de la Iglesia local.

El paso de los misioneros por una Iglesia local como Tierradentro, tiene la finalidad de preparar el camino al clero propio. Dos seminarios que responden a realidades diversas, concretan y apoyan la tarea que inicia la Pastoral Vocacional para el cumplimiento de este objetivo, el Seminario Menor Juan Gabriel Perboyre, para los jóvenes mestizos y el Seminario Indígena Páez, para los jóvenes indígenas paeces.

El Seminario Indígena Páez además del acompañamiento vocacional, forma a los jóvenes indígenas para que puedan realizar su opción cristiana, como líderes comprometidos al interno de sus comunidades. La labor Normativa se realiza también con las familias y con las respectivas comunidades de los estudiantes. Fomentando y promoviendo los valores culturales, la conservación de la lengua Páez y la vida cristiana. El grupo de formadores está constituido por misioneros vicentinos y profesores, entre ellos, varios bilingües.

En el periodo de formación de filosofía y teología, estudian tres jóvenes en el Seminario Indígena y ocho en el Seminario Mayor de la Arquidiócesis de Popayán. Si bien es cierto que los números, pueden ser solamente datos estadísticos, significan la esperanza de que esta lglesia vaya creciendo día a día.

Ya la Prefectura Apostólica de Tierradentro cuenta con seis sacerdotes incardinados, dos de ellos, sacerdotes indígenas propios de la región y egresados del Seminario Indígena.

Como todas las comunidades indígenas, los paeces tienden a desaparecer por la influencia de la "cultura blanca", sobre todo, con la perdida de la lengua, de las costumbres y de las tradiciones. Por esto, hace once años viene funcionando una estación de radio bilingüe: RADIO EUCHA. 'Eucha', es el saludo tradicional entre tos indígenas y ha sido adoptado como el nombre oficial de esta emisora que cubre todo el oriente caucano y parte del departamento dei Huila. Durante estos años de servicio se ha trabajado por el desarrollo de la zona dando la posibilidad a los pobres de acceder a los micrófonos y desde allí poder comunicar a los otros sus sentimientos, sus inquietudes, sus quejas y sus saludos, la participación es una de las razones de ser de la emisora. Radio Eucha es para la gente, es de los pobres y para los pobres. Sabemos que el pobre siempre tiene algo que decir y la mayoría de las veces no tiene los medios para hacerlo.

La emisora basa su trabajo en la reflexión, análisis e investigación de la realidad, buscando nuevas expectativas frente a la competencia de los medios, tratando de ofrecer en sus emisiones diarias una variada programación que sea evangelizadora, informativa, participativa, recreativa y educativa. Busca la promoción de los eventos culturales, los trabajos comunitarios y las asambleas organizativas. Siempre ha estado pendiente de los acontecimientos de la región a través de los promotores de radio que funcionan como los corresponsales en las comunidades, con una previa capacitación en cursos de comunicación y de organización comunitaria.

El aspecto social tiene un lugar privilegiado desde hace amos en la Prefectura, con la creación del DIT, Desarrollo Integral de Tierradentro se buscaba dar una solución a los problemas de salud, vivienda, formación social, y promoción de la mujer. Estos problemas se vieron agravados por la tragedia de 1994 y retomando todos los elementos del DIT, se creo el Departamento de Pastoral Social, con un trabajo realizado y apoyado por entidades internacionales. A cargo de un sacerdote vicentino, tres hermanas juanistas y tres laicos, se inició la labor de atención de la emergencia con la construcción de viviendas, colaborando a muchas familias en la reconstrucción de sus casas que habían quedado parcialmente destruidas; se ha venido apoyando a un centenar de familias con pequeños aportes económicos, para la iniciación de empresas de tipo familiar a nivel agropecuario o industrial; se organizan empresas conformadas por mujeres para la elaboración de artesanías propias de la cultura; y se le dio mucho énfasis a la formación de los laicos en aspectos como la promoción de la mujer, derechos humanos, economía solidaria, organización y liderazgo social y en las parroquias los comités parroquiales de pastoral social.

En la parte educativa, el apoyo de la prefectura ha sido de gran importancia. El prefecto apostólico se ha encargado directamente de coordinar con un grupo de laicos, a los profesores que realizan esta labor educativa en las diferentes comunidades. Las Hijas de la Caridad aportan a este trabajo educativo, la posibilidad de formar los profesores por medio de la Normal Nacional, que ellas dirigen. Ligado a este aspecto y como parte esencial del trabajo pastoral, se ha descubierto la necesidad de reflexionar, investigar y adentrarse cada día más en el medio cultural de la gente, para comprender, vivir y poder realizar lo que pide la nueva evangelización, la inculturación del evangelio.

Todo este esfuerzo evangelizador busca que la Palabra del Dios, creciendo en medio de esta comunidad eclesial pueda ser no solamente un signo de esperanza, sino la fuerza que guíe los pasos de un pueblo que siempre ha luchado por experimentar en su realidad y en su historia al Dios de la vida.