La intercesión por los sacerdotes.
Trabajando con sacerdotes en el carisma de San Vicente
por Kevin Scallon, C.M.
Comencé con Intercesión por los Sacerdotes tras experimentar una gran preocupación a principios de los años 70 cuando trabajaba como director espiritual en el Colegio All Hallows. Hasta allí llegaban continuamente noticias de antiguos alumnos que dejaban el sacerdocio, en algunos casos a los pocos años de comenzado el ministerio. La cuestión era: "¿qué se podría hacer?", y a la vez que se hablaba mucho de ello, parecía que era poco lo que se podía hacer. En 1974, llegó a mi conocimiento la existencia de un movimiento en los Estados Unidos llamado Intercesión por los Sacerdotes. Me sorprendió tal idea y me dije a mi mismo: "Sí, al menos podemos rezar por la renovación espiritual del sacerdocio". Por aquel entonces yo había tenido una repentina, y muy importante, experiencia de conversión sobre la realidad de Cristo en mi propia vida que me afectó enormemente en mi vida interior y mi ministerio sacerdotal.
Y así fue como, en 1976, junto con el Padre Myles Rearden, C.M. pensé en organizar la primera Intercesión por los Sacerdotes, no sabiendo con plena certeza lo que estaba haciendo. La respuesta inicìal de los sacerdotes fue desalentadora. La gente se apuntaba, pero se daba de baja en el ultimo momento. Esto me planteó la duda de si debía continuar o no. Le expuse la situación al Obispo O'Mahoney, que se encontraba en All Hallows durante su descanso anual. Le dije: "Señor Obispo, he preparado esta Intercesión por los Sacerdotes y no viene nadie". Nunca olvidaré su contestación. Me dijo: "Aunque solamente seáis vosotros dos, empezad". Ese día, me pareció como si el Señor me hablara a través de él. Comenzamos el 16 de Julio de 1976, festividad de Nuestra Señora del Carmen, con doce sacerdotes.
Por aquel tiempo, la renovación carismática se encontraba en todo su apogeo y muchos de los sacerdotes que vinieron habían experimentado un gran despertar espiritual a través de la misma. Ese año, 1976, a lo largo de las cuatro semanas de duración, alrededor de 150 sacerdotes participaron en la primera Intercesión por los Sacerdotes. Ahora, en la década de los 90, son cientos los sacerdotes de toda Irlanda y de otros muchos países viene a tomar parte. Durante los últimos años, durante el mes de agosto, alrededor de mil sacerdotes han participado en la Intercesión por los Sacerdotes.
Desarrollo
Rápidamente fue evidente que para que la Intercesión por los Sacerdotes atrajera a los sacerdotes con diferentes experiencias sacerdotales, debía de estar firmemente enraizada en lo que los sacerdotes tienen en común, más que en lo que, a veces, les divide. Desde el principio, y hasta ahora, hemos dado una gran libertad a los que han venido. Por ejemplo, no era necesario matricularse ni avisarnos de que iban a venir. En el seminario siempre hemos tenido muchas habitaciones disponibles. Tampoco tienen que decirnos cuánto tiempo van a estar, ni cuándo se irán. Este acuerdo pareció funcionar bien. Lo que si hicimos fue pedirles que, durante su estancia, participaran en cuantas actividades tuvieran lugar.
¿Por qué la Intercesión por los Sacerdotes?
La intercesión es la respuesta que hacemos a nuestra creencia en el Espíritu Santo, que está presente y ora en la Iglesia, el cuerpo completo de Cristo (Romanos 8, 26). Para el sacerdote del evangelio es una participación misteriosa en esa oración que el Espíritu Santo reza en nosotros; la oración del propio Cristo quien "... en los días de su vida mortal ... ofreció ruegos y súplicas con poderoso clamor y lágrimas (Hebreos 5, 7) y puede salvar por siempre a quienes por él se acercan a Dios, ya que está siempre vivo para interceder en su favor".(Hebreos 7, 25) (Cf. C.C.C.2634),
La intercesión, elemento esencial del eterno Sacerdocio de Jesús, es también esencial para el ministerio sacerdotal. La Intercesión por los Sacerdotes significa orar por los intercesores como hizo el propio Jesús. "Simón, Simón, mira que Satanás ha solicitado el poder cribaros como trigo; pero yo he rogado por tí, para que tu fe no desfallezca. Y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos" (Lucas 22, 31-32).
Solamente hay un sacerdocio - el Sacerdocio de Cristo-, solamente hay un sacrificio de salvación, el que Jesús ofreció en la cruz. A través del bautismo, todo el pueblo de Dios comparte este sacerdocio de forma espiritual y mística, representando a la Iglesia-Cuerpo de Cristo. Los sacerdotes lo comparten de forma especial, puesto que representan a Cristo, Cabeza de la Iglesia. Es el ministerio del sacerdote el que hace posible que la totalidad de la Iglesia ejerza su sacerdocio espiritual, ya que solamente el sacerdote que actúa "in persona (Christi" puede hacer que el ofrecimiento de Cristo esté presente entre el pueblo de Dios que se une a él ofreciéndose.
Actuar "en nombre de Cristo" requiere algo más que la ordenación sacerdotal. Lumen Gentium nos recuerda que el primer requerimiento para el sacerdocio es la santidad de la vida (Par.41). Esta es la razón por lo que tenemos la Intercesión por los Sacerdotes - para orar por nuestra santidad como sacerdotes y por los obispos y sacerdotes de todo el mundo.
Oramos para que los sacerdotes estén colmados del amor de Cristo, para que estén seguros de su identidad y de su vocación, y vivos con el poder del Espíritu Santo.
También oramos y damos gracias por el gran número de sacerdotes fieles, para que crezcan en el amor de Cristo y para que su título de "Padre" tenga significado por todos aquellos que han sido traídos a una nueva vida y santidad.
Oramos por los sacerdotes que son perseguidos y encarcelados, por quienes son rchazados y pobres.
Oramos para que una auténtica vida interior libre a los sacerdotes del materialismo y de la sensualidad, y para que termine el desaliento, la indiferencia y el excepticismo.
Oramos para que estén protegidos del engaño del mal y salvaguardados de toda confusión en la doctrina y de la rebelión contra la autoridad de la Iglesia.
La Intercesión por los Sacerdotes siempre se ha caracterizado por una gran sinceridad. Las habladurías y el excepticismo están ausentes. Todo el mundo reconoce humildemente la necesidad del arrepentimiento y de la curación y renovación espiritual. La alegría del Señor es evidente. Cada año, afirmamos, que los sacerdotes que vienen a orar por otros se marchan bendecidos. Eso ha sido cierto hasta ahora. La Intercesión por los Sacerdotes es un trabajo de fe, pero por encima de todo, es un gesto de gran amor al don del sacerdocio y a todos los "vasos de arcilla" que lo contienen.
Temas para cada día.
Cada día tiene un carácter especial basado en el tema de ese día.
Por ejemplo:
Lunes:Arrepentimiento y Reconciliación.
La negación del pecado, extendida por todo el mundo secular, ha afectado a la manera de pensar de muchos sacerdotes. El énfasis en el pecado social, muy necesario en su propio contexto, ha impedido que muchos sacerdotes examinen el pecado en su vida personal. En el contexto del rito penitencial, tratamos muy directamente, y en considerable detalle, de la necesidad del arrepentimiento. Instamos a los sacerdotes a la celebración del Sacramento de la Reconciliación.
Martes: Curación y Crecimiento.
El ministerio de la curación ha sido uno de los grandes frutos de renovación dentro de la Iglesia. Al igual que Jesús en los Evangelios, la curación y la evangelización van unidas. La psiquiatría y la psicología son útiles como herramientas de diagnóstico; pero el que cura es solamente el Señor. Solamente la gracia de Cristo es la que puede llevar la integridad a una vida rota. Esta es la razón por la que ofrecemos el sacramento de la unción de enfermos en la Misa de este día, junto con un servicio de curación por la tarde. Los frutos de este ministerio, a lo largo de los años, no se pueden exagerar.
Miércoles: María, Madre de la Iglesia.
Cada vez vemos más la importancia de que los sacerdotes tengan devoción a la Madre de Dios. En este día hablamos de ella, y terminamos con un acto de Consagración a Nuestra Señora.
Jueves: Sacerdocio y Eucaristía.
Este día se centra en la renovación de nuestra ordenación sacerdotal y en la conversión al sacerdocio (2 Tim. 1, 6-7). Para ello celebramos una paraliturgia que incluye la renovación de nuestras promesas bautismales y de las promesas hechas al Obispo durante la Misa Crismal del Jueves Santo, culminando con la oración en tomo al Santísimo Sacramento. Los sacerdotes encuentran en esta pequeña ceremonia una experiencia espiritual profunda y conmovedora.
Viernes: Discípulos.
"Los Obispos, junto con los sacerdotes como colaboradores, tienen como primera misión la de "predicar el Evangelio a todos los hombres", siguiendo la voluntad de Cristo. Ellos son los "heraldos de la fe, que atraen a nuevos discípulos de Cristo; ellos son los auténticos maestros de la fe apostólica, fundada en la autoridad de Cristo" (CCC 888).
"El Obispo y los sacerdotes santifican la Iglesia con su oración y su trabajo, con su ministerio de la palabra y de los sacramentos. La santifican con su ejemplo, "no dominando a aquellos que están a su cargo, sino siendo ejemplo para el rebaño". Así pues, "junto con la confianza del rebaño a ellos encomendado, alcanzarán la vida eterna". (CCC, 893)
"Nuestra vocación consiste en abarcar los corazones de todos los hombres, para así hacer lo que hizo el hijo de Dios, que vino al mundo para iluminarlo. Es por tanto cierto que se me envía, no solamente para amar a Dios, sino para hacer que se le ame. No es suficiente amar a Dios si mi vecino no lo hace también (San Vicente de Paúl XII 262).
"Si es verdad que se nos ha llamado para predicar el amor de Cristo por todo el mundo, si tenemos que inflamar las naciones con su amor, si se nos ha llamado para proyectar el fuego divino en la tierra, hermanos si todo esto es así, ¡qué gran fuego de amor divino debe estar ardiendo en mi alma! (San Vicente de Paúl XII 263).
Horario del día
Basado en el tipo de experiencia de oración de los sacerdotes.
8:30Desayuno.
9:30Oración de la mañana (Oficio Divino), Intercesión.
10:15Tiempo de oración (para oración personal intercesión y reflexión).
11:15Café.
11:45Eucaristía (Los Martes y Jueves se incluirá la Liturgia de la Unción de Enfermos para aquellos que lo soliciten.
1:00Almuerzo (seguido de tiempo libre para descansar, recreo, etc.).
3:30Té.
4:00Lunes:Penitencia.
Martes:Servicio de Curación.
Miércoles:Compartir la fe.
Jueves:Renovación del Sacerdocio.
5:15Oración de la tarde (Oficio Divino) e intercesión con Adoración Eucarística.
6:00Cena.
7:15Rosario - seguido de una charla y comentario.
En el correr de los años, hemos aprendido lo importante que es que los sacerdotes que toman parte en la Intercesión por los Sacerdotes tengan una experiencia nueva sobre la celebración de la Liturgia de las Horas y de la Eucarístia. Por este motivo, hemos intentado mantener un nivel de celebración litúrgica tan alto como nos ha sido posible. Muchos sacerdotes nos han dicho que lo han encontrado de gran ayuda.
Desarrollo continuo
Desde Irlanda, la Intercesión por los Sacerdotes se ha extendido a Inglaterra, Escocia, Francia, Australia, Papuasia Nueva Guinea, Nigeria, Filipinas y Estados Unidos.
Para ofrecer una idea del ministerio y de cómo se ha aceptado, es interesante referimos a la experiencia de Filipinas. En noviembre de 1993 organizamos dos retiros en Filipinas: uno en Manila y otro en Cebu. Al retiro de Manila acudieron 380 sacerdotes y 13 Obispos. Al de Cebu 210 sacerdotes y 9 Obispos, entre ellos el Cardenal Vidal. En noviembre de 1994 organizamos otros dos retiros. El primero de ellos en Tagaytay, Luzón, al que acudieron 620 sacerdotes y 10 Obispos. Al segundo, en Mindanao, acudieron 230 sacerdotes y 80 seminaristas. Un cohermano americano que había pasado la mayor parte de su vida en China y Vietnam, y que acudió al primer retiro, comentó. "ha sido el mejor retiro de toda mi vida". En los dos últimos años hemos colaborado con sacerdotes de 42 Diócesis. Para el año que viene tenemos programados dos retiros para las restantes Diócesis. Se nos ha pedido que en 1996 organicemos un retiro de Intercesión por los Sacerdotes para la totalidad de la jerarquía de Filipinas.
Cuando en noviembre de 1994 terminamos en Filipinas, fuimos a trabajar con sacerdotes de Hong Kong y Macao. Allí nos encontramos con tres Obispos de la Iglesia clandestina de China que nos rogaron que fuéramos a China para organizar retiros. Ya se están haciendo planes para este fin.
En todo este trabajo, el carisma de San Vicente es claro y evidente, pero como todas las cosas, se tiene que experimentar para entenderlo en su totalidad. Sin embargo, este enfoque para trabajar en la renovación del sacerdocio no se ha visto libre de críticas. Para algunos, se percibe como algo no relevante para una Iglesia que ha llegado a resaltar tanto el papel de los seglares. Otros, opinan que es demasiado sacerdotal, demasiado clerical y que presta excesiva atención al sacerdocio. Nadie conoció mejor que San Vicente la importancia del papel de los seglares y del ministerio del sacerdocio. Cualquier énfasis sobre el papel de los seglares y sobre el ejercicio de su sacerdocio bautismal no debe disminuir la importancia y el papel único del sacerdocio ministerial y jerárquico:
Mientras el sacerdocio común de los fieles se ejercita por el desarrollo de la gracia bautismal, --una vida de fe, esperanza y caridad, una vida según el Espíritu---, el sacerdocio ministerial es un medio por el que Cristo construye y dirige incesantemente su Iglesia. Por esta razón se trasmite por su propio sacramento, el Sacramento del Orden.
En el servicio eclesial del sacerdocio, es el propio Cristo quien se presenta a su Iglesia como la Cabeza de su Cuerpo, Pastor de su rebaño, Sumo Sacerdote del Sacrificio Redentor, Maestro de la Verdad. Esto es lo que la Iglesia quiere decir cuando afirma que el sacerdote, por virtud del sacramento del Órden, actúa en persona Christi Capitis" (CCC#1547-1548)
Otros critican la Intercesión por los Sacerdotes por volver a un tipo de devoción de la antigua iglesia con un excesivo énfasis en la Adoración Eucarística, la confesión personal, el rosario, etc. Quizás sea así, pero en los más de veinte años que llevo trabajando con sacerdotes, he aprendido que no es posible llegar a una renovación espiritual, ni como persona ni como sacerdote, sin la gracia del arrepentimiento continuo del pecado y sin encontrarse con Cristo Redentor a través de la oración y de los Sacramentos, especialmente de la Eucaristía. La lucha que yo he experimentado con el pecado en mi propia vida, unida a las numerosas horas que he pasado oyendo confesiones de sacerdotes de todos los rincones del mundo, me han convencido de la imperiosa necesidad de este tipo de ministerio. A lo largo de estos años, en los que se ha hablado tanto de la renovación sacerdotal, sé que el Señor ha bendecido la Intercesión por los Sacerdotes, y que a su vez ha sido una fuente de gracia, renovación y salvación para innumerables sacerdotes.
Sor Briege McKenna, de la Orden de las Hermanas de Santa Clara.
La Hermana Briege es una humilde clarisa, miembro de la congregación llamada Hermanas de Santa Clara. Es la autora del libro titulado "Miracles Do Happen" (Los Mllagros Existen), que se ha convertido en una especie de clásico espiritual y que ha sido traducido a catorce idiomas, incluidos el chino, coreano y japonés. En 1970, durante la celebración de la Eucaristía en Florida, lugar en el que había vivido desde el año 1967, fue curada instantáneamente de una grave artritis reumática. Vino a visitarme porque estaba interesada en el trabajo de Intercesión por los Sacerdotes. Inmediatamente fue obvio para mí que el Señor la había concedido grandes dotes. Ya era muy conocida por su dotes curativas, pero lo que más me llamó la atención fue su extraordinario carisma a la hora de ayudar a los sacerdotes a renovar su vida espiritual y su ministerio sacerdotal. Desde entonces, la Hermana Briege ha colaborado en la Intercesión por los Sacerdotes. Desde 1985, con la bendición y el pleno consentimiento de nuestros respectivos superiores, la Hermana Briege y yo hemos viajado a numerosas partes del mundo para trabajar por la renovación espiritual de los sacerdotes. Soy muy consciente de que el fruto de nuestro ministerio se debe, y no en poca medida, al don especial que Dios la ha otorgado para el sacerdocio de estos tiempos.
Grupo Central
Además de la Hermana Briege, también he sido una gran bendición el contar con la ayuda de otros sacerdotes; dos cohermanos Vicencianos, un Franciscano, dos sacerdotes diocesanos, un Palotino, un Salesiano y un Dominico. Todos ellos ofrecen su tiempo cada año durante cuatro semanas y vienen a trabajar en la Intercesión por los Sacerdotes. Su dedicación en el ministerio y su lealtad al mismo han sido una fuente de bendiciones para los sacerdotes que participan.
Compromiso Laico
Desde el comienzo de la Intercesión por los Sacerdotes, el laicado ha participado de diversas formas. Durante los primeros ocho o nueve años, las Hijas de la Caridad desempeñaron todas las tareas domésticas y servicio de comedor. Cada viernes por la tarde, la gente se reúne en la capilla de All Hallows para orar ante el Santísimo por todos los sacerdotes del mundo. El folleto del Rosario fue preparado especialmente para ellos y a petición propia. Este folleto ha sido traducido a diferentes idiomas y miles de copias del mismo se han distribuido por todo el mundo. Los laicos sienten una gran urgencia, a la vez que una gran voluntad, de orar por los sacerdotes de la Iglesia.
Conclusión
El ministerio de Intercesión por los Sacerdotes comenzó en el espíritu de San Vicente, cuyo celo por la renovación del sacerdocio fue único en la historia de la Iglesia. Permitidme que concluya con estas palabras de nuestro santo fundador.
"¡Ay, Padres, qué gran cosa es un buen sacerdote!. ¿Qué no puede hacer un buen sacerdote? ¿qué conversiones no puede procurar? Fijáos en el Señor Bourdaise, ese sacerdote tan excelente. ¡Qué de cosas hace y puede! De los sacerdotes depende la felicidad del cristianismo, ya que los buenos feligreses, cuando ven a un buen eclesiástico, a un pastor caritativo, lo veneran y oyen su voz, procurando imitarle. ¡Cuanto hemos de procurar hacer que todos sean buenos, ya que es ésa nuestra misión, y el sacerdocio es una cosa tan elevada!.
Pero, ¡Salvador mío¡, si un buen sacerdote puede hacer grandes bienes, ¡qué daño hace un sacerdote malo! ¡Y cuánto cuesta ponerlo en el buen camino! ¡Salvador mío! ¡Cómo deben entregarse a ti los pobres misioneros para contribuir a la formación de buenos sacerdotes, ya que es la obra más difícil, la más elevada, la más importante para la salvación de las almas y el progreso del cristianismo". (San Vicente de Paúl (XI 7-8).
Para una completa explicación del desarrollo diario de Intercesión por los Sacerdotes puede verse el folleto titulado "Guidelines for the Intercession for Priests".
* Lugares visitados
Canberra/Goulbum, ACT, Australia
Brisbane, Australia
Canberra, Australia
Melbourne, Australia
Armidale, Nueva Gales del Sur, Australia
Bathurst, NGS Australia
Dubbo, NGS Australia
Lismore, NGS Australia
Oberon, NGS Australia
Caims, Queensland, Australia
Perth, O. Australia
Gorka, Papuasia Nueva Guinea
Madang, Papuasia Nueva Guinea
Wewak, Papuasia Nueva Guinea
Kiribati, Pacifico
Agana, Guam
Ljubljana, Eslovenia
Medjugorje, Erzegovina
Magdalenka & Gostyn, Polonia
Eindhoven, Holanda
Bruselas, Bélgica
Glasgow, Escocia
Paisley, Escocia
Mid-Glam, País de Gales
Cheshire, Inglaterra
Clifton, Inglaterra
Middlesborough, Inglaterra
Plymouth, Inglaterra
Preston, Inglaterra
Sheffield, Inglaterra
York/Leeds, Inglaterra
Fátima, Portugal
Vista, California
Denver, Colorado
Bloomfield, Conneticut
Moodus, Conneticut
North Haven, Conneticut
Norwich, Conneticut
Watertown, Conneticut
Miami, Florida
New Port Richey, Flonda
Orlando, Florida
Palm Beach, Florida
Palm Habor, Florida
Pensacola, Floiida
Safety Habor, Florida
St. Augustine, Florida
St.Petersburg, Florida
Cagayan, Mindanao, Fllipinas
Cebu, Filipinas
Iloilo City, Filipinas
Manila, Fllipinas
Tagaytay, Filipinas
Singapur
Kuching, Sarawak, Malasia
Melaka-Johor, Malasia
Miri, Sarawak, Este de Malasia
Hong Kong / Macao
Taiwán China
Fukuoka City, Japón
Ibaraki-Ken,-Japón
Kumamoto City, Japón
Seúl, Corea del Sur
Cheju, Corea del Sur
Derry, Irlanda
Dublin, Irlanda
Londres, Inglaterra
Carlow, Irlanda
Kumasi, Ghana
Nakuru, Kenia
Jos, Nigeria
Auwka, Nigeria
Abakaliki, Nigeria
Onishia, Nigeria
Benin City, Nigeria
Lagos, Nigeria
Split, Croacia
Carlow, Irlanda
Clare, Irlanda
Cloyne, Irlanda
Cork, Irlanda
Donegal, Irlanda
Fermanagh, Irlanda
Galway, Irlanda
Kerry, Irlanda
Kildare, Irlanda
Knock, Irlanda
Louth, Irlanda
Meath, Irlanda
Raphoe, Irlanda
Tyrone, Irlanda
Wexford, Irlanda
Armagh, Irlanda del Norte
Belfast, Irlanda del Norte
Derry, Irlanda del Norte
Down, Irlanda del Norte
Edmonton, Alberta, Canadá
Winipeg, Manitoba, Canadá
Grand Falls, Newfoundland, Canadá
Nueva Escocia, Canada
Irondale, Alabama
Douglas, Arizona
Tempe, Arizona
Tucson, Arizona
Manhatten Beach, California
San Bernardino, Califomia
Tampa, Florida
Peachtree, Georgia
Chicago, Illinois
Notre Dame, Indiana
Wichtia, Kansas
Nueva Orleans, Louisiana
St.Cloud, Minnesota
Biloxi, Mississippi
Jackson, Mississippi
Pass Christian. Ussissippi
St. Louis, Missouri
Omagh, Nebraska
Larchmont, Nueva York
Syracuse, Nueva York
Yonkers, Nueva York
Dunbar, Pennsilvania
San Antonio, Texas
Barbados, Antlllas
Granada, Antlllas
St.Vincent, Antlllas
Trinidad y Tobago, Antlllas
Lima, Perú
Campinas, Brasll
Fortaleza, Brasll
Itaici, Brasll
Porto Alegre, Brasll
Recife, Brasll
Sao Paulo, Brasll