Cristianos y Musulmanes en Nigeria

CRISTIANOS Y MUSULMANES EN NIGERIA

Timothy Njoku, C.M.

Una corta Historia

El islam llegó a Nigeria antes que el cristianismo. Los primeros musulmanes, que trajeron el islam en el siglo IX, procedían de Egipto. Eran principalmente mercaderes árabes y bereberes. El islam fue introducido principalmente por los musulmanes Fulani que emigraron a Nigeria en el siglo XV a la caída del antiguo reino de Songhay. Este período coincidió con la exploración Portuguesa de África Occidental.

El cristianismo no se entendió más allá de las zonas costeras donde se asentaron los exploradores. El segundo intento de establecer el cristianismo tuvo lugar a mediados del siglo XIX. El cristianismo siguió a la repatriación de los esclavos negros de Europa y América, como resultado de los principios de la Guerra Americana de Independencia y como consecuencia de la Revolución francesa. Los esclavos conversos y los misioneros se establecieron en Sierra Leona y después de algunos años de preparación teológica, éstos últimos fueron enviados principalmente al sur-oeste de Nigeria. La presencia católica no se estableció en el este de Nigeria hasta 1885.

Los Fulani fueron los principales propagadores de la religión islámica en Nigeria. Son el grupo nómada más numeroso en el mundo. Su aceptación del islam y su propagación, desde su primer contacto con los Bereberes en Futa Jalon del África Occidental elevó su estatus social. Por la educación islámica, especialmente en Timbuctu, la antigua ciudad científica islámica en el Oeste de África, los Fulani se convirtieron en un grupo aristocrático con el que había que contar en el desarrollo de la historia religiosa en el África Occidental.

Desde el siglo XVII han dirigido siempre todas las revoluciones religiosas que derrocaban todos los órdenes social, económico y político existentes en África Occidental.

Ellos vieron siempre el Islam como la religión de los dirigentes, de los privilegiados, del poder político. Por esta razón, siempre se han asociado en toda la política del África Occidental con los poderes básicos. Ellos creen que convirtiendo a los gobernantes tradicionales al islam, los musulmanes tienen asegurado el poder político. Donde esta estrategia falló, como en Songhay, recurrieron al derrocamiento del sistema político establecido bajo el pretexto de que no habían impuesto el Sharia (la ley islámica) en su sistema legal.

Alrededor del siglo XV los Fulani emigraron a Nigeria y se asentaron entre los Hausa. A comienzos del siglo XIX, cuando su número se había incrementado, derrocaron a los reyes Hausa e instalaron en su lugar gobernantes Fulani musulmanes. Esta revolución fue dirigida por Uthgman dan Fodio en 1804 que estableció un Estado Islmámico en el Norte de Nigeria.

Colonialismo y Cristianismo

La repatriación de los ex-esclavos africanos renovó el interés económico y político europeo en Nigeria y en el África Occidental. Los Misioneros ofrecieron una educación occidental en la parte sur de Nigeria. A petición de los líderes musulmanes se impidió al cristianismo avanzar hacia la tierra del norte, corazón del islam. Como resultado, el norte estuvo excluído de la educación y la tecnología moderna. En el norte, sólo unos pocos privilegiados fueron educados en unas cueantas escuelas gubernamentales. Desde entonces, el desequilibrio entre la educación del norte y del sur ha ido aumentando.

Periodo después de la Independencia

Hasta finales de los años 1970s, musulmanes y cristianos vivieron siempre pacíficamente unidos, o más exactamente, hasta la revolución iraní. En este período surgió en Nigeria un nuevo impulso de propagación del islam. Los nigerianos fueron testigos, por primera vez, de la amenaza de ver como se trataba de convertir tantos como fuera posible al Islam, y la posibilidad de actualizar Nigeria de acuerdo con los principios Islámicos -- en el gobierno, sistema legal, cultura, instituciones financieras, etc. Estos aspectos de intolerancia parece fueron introducidos en los Sunna Islam locales por grupos de fuera. Estos Islámicos fundamentalistas se infiltraron en los campos universitarios e incitaron a los estudiantes musulmanes a quemar las capillas e iglesias cristianas. Los cristianos fueron atacados frecuentemente por predicar abiertamente y sus iglesias quemadas. Los disturbios se extendieron como el fuego de una ciudad a otra del norte de Nigeria. Los cristianos fueron asesinados a millares.

La función del Gobierno

El fracaso del gobierno militar, al no poder controlar los disturbios religiosos y llevar ante la justicia a los responsables de los asesinatos de masas de cristianos, hizo emerger muchas sospechas. Las sospechas crecieron cuando el gobierno inscribió a Nigeria como miembro de la Organización de la Conferencia Islámica. Desde entonces, los cristianos han mirado siempre con recelo todas las acciones del gobierno. Esto se acentúa cuando se recuerda que desde 1983, cuando el último gobierno civil fue derrocado, están en el poder militares musulmanes. Existe una fuerte sospecha de que el Califato con base en Siokoto, Nigeria, está usando a oficiales musulmanes para dirigir los asuntos del país a través de decretos. La constitución nacional fue suspendida desde la toma de poder por los militares. La situación está siendo inquietante para los cristianos, que creen que los musulmanes están dirigiendo indirectamente el país por la puerta de atrás, con un oficial musulmán cambiando el bastón de mando con otro. Desde la toma de poder por los militares, los musulmanes no han demostrado ningún signo de desaprobación por la violación de la democracia en Nigeria.

La situación hoy

Actualmente (Diciembre 1994) está teniendo lugar en Nigeria una conferencia constitucional. Muchos temas son discutidos. Entre ellos el de compartir el poder. Se ha aceptado una moción de que el poder se turne entre el norte y el sur de Nigeria. Esto no ha sido fácil de aceptar para los musulmanes más duros, ya que el poder político ha sido su compensación por su atraso en la educación e industria. El fracaso del Califato a aceptar este nuevo experimento político puede costar al norte una fortuna. Después de la anulación de las últimas elecciones civiles, que se cree había ganado un Yoruba Musulmán, existen todos los indicios de que todo el sur de Nigeria puede revolverse contra el norte. El petroleo, que constituye el 90% de las ganancias exteriores, proviene del sur. Será mejor para los musulmanes, por razones económicas privarse del poder político a intervalos.

El Nigeriano medio vive pacíficamente con los de otras religiones diferentes de la suya. Desgraciadamente los líderes religiosos y dictadores militares han usado la religión para incitar a la gente a matarse unos a otros basándose en sus creencias. La verdad está apareciendo con más claridad la co-existencia y la tolerancia es el mejor camino para Nigeria.