La Congregación de la Misión

LA CONGREGACIÓN DE LA MISIÓN

Fin de la Congregación de la Misión:

San Vicente de Paúl fundó la Congregación de la Misión en 1625, para la evangelización de los Pobres y la formación del Clero. Hoy la Congregación ha definido su fin de la siguiente forma:

"El fin de la Congregación de la Misión es seguir a Cristo evangelizador de los Pobres. Este fin se logra cuando sus miembros y comunidades, fieles a San Vicente:

1º procuran con todas sus fuerzas revestirse del espíritu del mismo Cristo (RC I, 3), para adquirir la perfección correspondiente a su vocación (RC XII, 13);

2º se dedican a evangelizar a los pobres, sobre todo a los más abandonados;

3º ayudan en su formación a clérigos y laicos y los llevan a una participación más ple na en la evangelización de los pobres" (Constituciones, art. 1).

Atenta a los signos de los tiempos y a las realidades de nuestra época, la Asamblea General de 1980, en el momento de definir este fin, en lugar de decir como San Vicente en las Reglas Comunes: "Predicar el Evangelio a los Pobres, particularmente a los del campo", ha elegido: "evangelizar a los Pobres, sobre todo a los más abandonados"; en lugar de decir como san Vicente: "ayudar a los eclesiásticos a adquirir las ciencias y las virtudes necesarias a su estado", ha elegido: "ayudan en su formación a clérigos y laicos, y los llevan a una participación más plena en la evangelización de los Pobres".

Espíritu de la Congregación:

"El espíritu de la Congregación comprende, por consiguiente, aquellas íntimas disposiciones del alma de Cristo que el Fundador recomendaba, ya desde el principio, a sus compañeros: amor y reverencia al Padre, caridad compasiva y eficaz con los pobres, docilidad a la Divina Providencia" (Const., art. 6). "La Congregación intenta expresar su espíritu también con las cinco virtudes sacadas de su peculiar visión de Cristo, a saber: la sencillez, la humildad, la mansedumbre, la mortificación y el celo por las almas, de las cuales dijo San Vicente: «En el cultivo y la práctica de estas virtudes la Congregación ha de empeñarse muy cuidadosamente, pues estas cinco virtudes son como las potencias del alma de la Congregación entera y deben animar las acciones de todos nosotros» (Reglas Comunes, II, 14)" (Const., art. 7).

Características de las Obras de la Congregación:

"En la obra de evangelización que la Congregación se propone realizar, tengamos presentes estas características:

1º preferencia clara y expresa por el apostolado entre los pobres: su evangelización, en efecto, es señal de que el Reino de Dios se acerca a la tierra (cfr. Mt. 11,5);

2º atención a la realidad de la sociedad humana, sobre todo, a las causas de la desigual distribución de los bienes en el mundo, a fin de cumplir mejor con la función profética de evangelizar;

3º alguna participación en la condición de los pobres, de modo que no sólo procuremos evangelizarlos, sino también ser evangelizados por ellos;

4º un verdadero sentido comunitario en las obras apostólicas, de manera que nos fortalezcamos unos a otros en la común vocación;

5º disponibilidad para ir al mundo entero, a ejemplo de los primeros misioneros de la Congregación.

6º búsqueda continua de la conversión, tanto por parte de cada uno como por parte de la Congregación entera, según la mente de San Pablo que aconseja: «No os amoldéis al mundo este, sino íos transformando con la nueva mentalidad» (Rm 12,2)” (Const., art. 12).

Estatuto jurídico:

La Congregación de la Misión es una Sociedad de Vida Apostólica, compuesta por Sacerdotes y Hermanos. Nuestro estatuto jurídico está definido por nuestras Constituciones, en el cuadro de los cánones 731-746. Hacemos votos, pero no somos religiosos, de acuerdo con la intención de san Vicente que quiso para nosotros la flexibilidad y la movilidad de una sociedad apostólica que vive y trabaja en estrecho contacto con el mundo.

Algunas estadísticas:

En 1995, la Congregación tiene 3.604 miembros incorporados: 30 Obispos, 3.224 Sacerdotes, 216 Hermanos y 123 Estudiantes de filosofía y teología (que ya han hecho los votos).

¿Donde trabajamos?

Trabajamos en 80 países y estamos organizados en 3 Vice-Provincias: San Justino de Jacobis (Eritrea), Mozambique y Costa Rica, y en 45 Provincias: Madagascar, Etiopía, Zaire (con la región de Bélgica) - América Central, Argentina, Brasil (Río de Janeiro, Curitiba y Fortaleza), Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, Estados Unidos (Dallas, Filadelfia, Los Angeles, New England, San Luis), México, Perú, Puerto Rico, Venezuela, - China, Filipinas, India, Indonesia, Oriente, - Alemania, Austria, Eslovaquia, Eslovenia, España (Barcelona, Madrid, Salamanca y Zaragoza), Francia (París y Tolosa), Holanda, Hungría, Irlanda, Italia (Nápoles, Roma, Turín), Polonia, Portugal, - y Australia. Algunas Provincias comprenden varios países, como la de Oriente (Líbano, Egipto, Israel, Siria), América Central (Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Panamá); la Provincia de Argentina comprende también Paraguay y Uruguay.

Las vocaciones:

Los países que tienen más vocaciones son Polonia, Colombia, Indonesia, India, Madagascar, el Ecuador, Filipinas, Zaire, México, América Central. La edad media de los Cohermanos es muy elevada en Hungría, Holanda, China, París, New England, Roma, Tolosa, Filadelfia, Río de Janeiro y Dallas (más de 60 años). Las Provincias más "jóvenes en personal" son Filipinas, Zaire (sin los Cohermanos de Bélgica) India, México, Polonia, Madagascar, Etiopía, San Justino de Jacobis (Eritrea) y Chile (menos de 49 años).

Nuestras tareas, según las Constituciones y Estatutos:

Evangelizamos a los Pobres a través de las misiones populares (Const., art 14), hoy sobre todo en las parroquias (cf. Estatuto 10); tenemos también muchas misiones "ad Gentes" (Const., art, 16), cada Provincia debe aceptar al menos una misión en un país pobre o donde la Iglesia no esté todavía establecida de forma suficiente (Estatuto 5). Por ejemplo, Alemania mantiene la Vice-Provincia de Costa Rica; Nápoles la nueva misión de Albania, después de haber formado la Vice-Provincia de San Justino de Jacobis (Eritrea); etc. La Congregación, después de la Asamblea General de 1992, ha comenzado nuevas misiones en Europa del Este (Albania y próximamente Ucrania, después Siberia, Lituania), en Tanzania, en las Islas Salomón, y en Bolivia; ha reforzado las provincias de Cuba y de China (en Taiwan se preparan misioneros para China) y la Vice-provincia de Mozambique.

En la predicación de misiones populares o Ad Gentes, podemos contar frecuentemente con la colaboración de las Hijas de la Caridad y de muchos voluntarios laicos, animados del espíritu de San Vicente. Entre esos voluntarios surgen algunas vocaciones para Hijas de la Caridad y para la Congregación de la Misión.

Tenemos además seminarios para la formación del Clero (Const., art. 15). Esta obra no tiene actualmente el esplendor de antaño; sin embargo el Superior General recibe muchas peticiones de obispos de países misioneros o desprovistos de Clero autóctono. Hay muchos Cohermanos nombrados para la asistencia espiritual a las Hijas de la Caridad, ya sea como directores provinciales, ya como predicadores de ejercicios, confesores y capellanes. "Dado que la Congregación de la Misión goza de la misma herencia que las Hijas de la Caridad, los misioneros se prestarán gustosos a ayudarlas cuando lo pidan, especialmente en lo que concierne a ejercicios y dirección espiritual. También colaborarán siempre con ellas fraternalmente en las obras emprendidas de mutuo acuerdo" (Const., art. 17).

"Los misioneros tendrán especial cuidado de las asociaciones de laicos fundadas por San Vicente o que dimanan de su espíritu, pues como tales tienen derecho a que las asistamos y fomentemos. Si bien todos los misioneros deben estar preparados para prestar dichos servicios, es necesario, sin embargo, que haya algunos más versados en este cometido. Procúrese que esta animación tenga una dimensión espiritual, eclesial, social y cívica" (Estatuto 7). Trabajamos con la Asociación Internacional de Caridades en los diversos países, con la Sociedad de San Vicente de Paúl, la Juventud Mariana Vicenciana, la Asociación de la Medalla Milagrosa y otros grupos menos conocidos.

En algunos países, los colegios constituyen un apostolado muy necesario, al que se dedican muchos misioneros, desde el nivel primario, como en la India, hasta los estudios universitarios en Filipinas y en los Estados Unidos (cf. Estatuto 11).

Algunos apostolados extraordinarios:

Hay también Misioneros que trabajan con quienes viven en los grandes basureros de las ciudades (como en Payatas, Filipinas). Hay Misioneros que se consagran a las comunidades terapéuticas, a los drogodependientes y a las víctimas del SIDA (en algunos países de Europa con las Hijas de la Caridad y voluntarios laicos), en comunidades indígenas (en muchos países latino-americanos), con sordos (en Irlanda), con gitanos, prisioneros, niños de la calle, personas sin techo, etc. Hay pastorales específicas como los Misioneros en Brasil (Curitiba) que trabajan con camioneros, que están siempre en carretera. Hay Cohermanos que forman Comunidades Eclesiales de Base y se consagran a la formación de agentes laicos que asegurarán la asistencia espiritual donde no haya clero. Otros Cohermanos trabajan para formar "multiplicadores de nuestra acción vicenciana", sea por la animación de grupos laicos, sea en la enseñanza superior en instituciones universitarias de estudios eclesiásticos o en los diversos sectores de la enseñanza. Hay Cohermanos que participan en equipos de reflexión sobre la vida consagrada, la educación, el ateísmo, los medios de comunicación social, la pastoral familiar, la ayuda psicológica, etc. y ocupan una parte de su tiempo a dar cursos en los institutos diocesanos, en los de las Provincias de la Congregación o de otras Congregaciones.

Las Conferencias de Visitadores:

En los países donde hay dos o más Provincias (Brasil, España, Estados Unidos, Francia, Italia), los Visitadores y sus Consejos se reúnen regularmente para coordinar los apostolados que pueden asumir y realizar juntos y para realizar proyectos comunes, como casas de formación para todos sus candidatos (Seminarios Internos o noviciados, centros de estudios filosóficos o teológicos). Otras Provincias se han reunido en Conferencias continentales, como la de América Latina (CLAPVI) y más recientemente la de Europa (CEVIM), de África y Madagascar (COVIAM), y la de Asia y Pacífico. La Conferencia Latino-Americana de Provincias Vicentinas (CLAPVI) se ha caracterizado por una serie de encuentros y de cursos realizados para los cohermanos de diversos sectores (formadores, misioneros, párrocos, asesores de movimientos laicos). Actualmente estos cursos y encuentros están abiertos también a las Hijas de la Caridad y a los Laicos vicencianos. Igualmente hay grupos de Provincias que tienen una coordinación conjunta con las Hijas de la Caridad para la formación vicenciana, como en España o en Italia, etc. Hay Provincias donde los Seminaristas se reúnen regularmente para la formación vicenciana, como las de Europa o Brasil. Hay Seminarios Internos internacionales, como el de Argentina, Chile y Perú. Existe el proyecto de un teologado común para las Provincias y Vice-Provincias africanas (quizás en el Zaire).Hay programas que merecen una mención especial, como el de las Semanas de Estudios Vicencianos de Salamanca (España) o las Fichas del Equipo de Animación Vicenciana de Tolosa (Francia). Diversos países han publicado libros sobre san Vicente y su carisma, sobre temas vicencianos y las figuras que se relacionan con san Vicente. Actualmente se está escribiendo una Historia de la Congregación.

El SIEV y el CIF:

Para estimular los estudios vicencianos, se ha formado un Secretariado Internacional de Estudios Vicencianos, que organizó en París "Meses Vicencianos" de especialización para los Cohermanos en general, para los jóvenes formadores, para los Directores de las Hijas de la Caridad. Ahora, tenemos también en París el Centro Internacional de Formación San Vicente de Paúl al cual las Provincias deben enviar a los Cohermanos comprendidos entre los 35 y 50 años de edad, para su reciclaje vicenciano.

Algunas direcciones útiles:

- Curia General

Via dei Capasso, 30

00164 Roma - Italia

Tel. (39.6) 666 3730 / 666 3732 / 666 3736

Fax (39.6) 666 3831

- Casa Madre

95, rue de Sèvres

75006 París - Francia

Tel. (33.1) 42 22 63 70

Fax (33.1) 42 84 09 64

- Centro Internacional de Formación San Vicente de Paúl

95, rue de Sèvres

75006 París - Francia

Tel. (33.1) 42 22 63 70

Fax (33..1) 45 44 23 73