Bibliografía

Beato Marco Antonio Durando : Bibliografía

LUIGI CHIEROTTI, C.M.

Beato Marco Antonio Durando (1801 - 1880)

Ediciones San Pablo

Génova 2002, 122p., 9€

La larga espera de la beatificación del Padre Durando ha despertado un gran interés bibliográfico sobre una figura que, poco a poco, y en la medida que se le ha ido conociendo, no ha dejado de sorprendernos por su completa sintonía con el fundador. Los numerosos escritos de Durando evocan directamente a San Vicente. Se comprende, pues, que llamar al Padre Durando “el San Vicente italiano” no es una frase retórica.

En vísperas de su beatificación apareció un nuevo libro sobre el Padre Durando, escrito por el Padre Luigi Chierotti, casi el único biógrafo que ha profundizado sobre el nuevo Beato. (Ver también una biografía más completa del bienaventurado Durando, en su tercera edición de 565p., con numerosas ilustraciones fuera de texto). Este libro, publicado por ediciones San Pablo, incluye, en primer lugar, diez breves capítulos sobre los datos biográficos del Padre Durando, los hechos del Risorgimento de Turín y, sobre todo, su itinerario espiritual, que es un testimonio excepcional dentro de la Iglesia de su época y de la Familia vicentina. Las otras cien páginas del libro se leen con fluidez, y nos descubren a un hombre admirable por su inteligencia, su sabiduría y su capacidad de gobernar.

Nos preguntaremos cómo pudo durante su vida, no corta pero con precarios medios de locomoción, hacer cantidad de obras particulares y concretas para afirmar la fe por la línea de la caridad y con sorprendentes iniciativas que parecerían arriesgadas al sentido común en el siglo XIX. Al Padre Durando le debemos la llegada de las Hijas de la Caridad a Italia en 1883. Las dificultades que tuvo que superar prueban su total confianza en la Providencia y la verdadera audacia de su caridad. Le debemos también la difusión y organización de la Congregación de la Misión en el norte de Italia, trabajando en las misiones populares y en la formación del clero; la creación de la Obra de las Damas de la Caridad en 1835; las “Misericordias” para los pobres; las Hijos de María. Y aún cuando su obra original fue la fundación de las Hermanas Nazarenas para el cuidado y la guardia de los enfermos a domicilio, es imposible encontrar en el Turin de 1800 una obra de la Iglesia que no se beneficiase de sus cuidados, de su celo y de sus preocupaciones sacerdotales.

El trabajo del Padre Chierotti suscita el interés del lector y lo impulsa a abrazar el espíritu sencillo y ardiente de Durando. Imperceptiblemente el autor nos va revelando el secreto de su vida y de la entrega total del nuevo beato: su amor incondicional y apasionado por Jesús Crucificado que asume el dolor del hombre, de cada hombre, y lo lleva cariñosa y totalmente en sus brazos amorosos, donde no es posible refugiarse si no somos cómplices. El P. Durando, como todos los santos, vivió el calvario porque amó y enseñó a amar al crucificado. El calvario es la montaña de los enamorados del Señor -decia- y sólo los enamorados pueden quedarse.

Tomado de : “Échos de la Compagnie”, n° 9-10 : septembre-octobre 2002