Las proyecciones en el “Finding Vince 400” han comenzado, el Festival de Cine dedicado a San Vicente y que tiene el propósito de inspirar en los jóvenes la globalización de la caridad. 

En el centro Mariapoli en Castelgandolfo, los organizadores abrieron el evento con una mesa redonda de la que han participado más de 300 personas, la mayoría jóvenes, provenientes de muchas partes del mundo. En la apertura estuvieron presentes, el padre Tomaž Mavrič, CM, Superior General, padre Joseph Agostino, CM,  y una de las organizadoras del evento, Alma Perez. 

“El Festival es una gran noticia”, comenzó diciendo el padre Tomaž, “porque existe una fuerte tendencia a expresar los sentimientos negativos; sin embargo, y este festival lo ha demostrado, hay talentos que desean comunicar lo bueno, dar voz y inspirar a otros a actuar”.

El objetivo del Festival de hecho, es usar el lenguaje del cine y del teatro para llegar a los jóvenes e involucrarlos, en este proceso de globalización de la caridad. Como ha subrayado el padre Agostino, “desde hace muchos años la Iglesia hace uso del arte para comunicar el Evangelio, esto se ha venido perdiendo, hoy el festival en cierta forma, lo recupera.

El Festival de cine ha generado muchas expectativas, sobre todo porque es una experiencia nueva y como todas las novedades, contará con muchos riesgos, pero los organizadores del evento tienen confianza ya que a ellos mismos los ha emocionado e inspirado, como lo ha contado Alma Pérez, “en muchas ocasiones, me he hecho preguntas importantes como “Qué puedo hacer para ayudar a los otros?, ¿Por qué no he hecho nada hasta el día de hoy?

Un Festival como este, se convierte en un hito de profundos cambios en la comunicación del carisma Vicenciano a la luz de los 400 años y en el primero de los 500 años, pero sobre todo en relación con las grandes cuestiones del Sinodo de los Obispos que se está realizando en Roma y que tiene como tema fundamental los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional. Con el Festival Finding Vince 400 la Familia Vicenciana actualiza el carisma y la relación con las nuevas generaciones que, demuestra que una vez más, la caridad es inventiva hasta el infinito.

“Uno de mis grandes temores, era que no llegaran trabajos”, ha declarado el padre Agostino, “en cambio, llegaron casi 4000 y eso nos ha demostrado que hemos descubierto algo muy importante, porque el arte siendo espejo de la belleza, puede y debe ser el espejo de la verdad y de la justicia. Para compartir el arte y su belleza es necesario cambiar de prospectiva y, como ha subrayado Alma Perez, “entender que no estamos solos, sino que formamos parte de una gran comunidad  y debemos cuidar del destino de esta comunidad”.

Finding Vince 400 es un sueño que se hace realidad, ha insistido el padre Tomaž, de tal modo que muchas personas se involucran en este sueño vicenciano, solo de este modo, la globalización de la caridad, puede hacerse realidad.  

Girolamo Grammatico
Oficina de Comunicación