EL CARISMA DEL TEÓLOGO EN LA IGLESIA.

Una tarde de contrastes entre las perspectivas de diversas confesiones cristianas.

El contraste es interesante. Cuando se abordan las perspectivas de las diversas confesiones cristianas, se evidencian sus puntos en común, generando una sensación de familiaridad restituida. Porque — cuando las diferencias juegan tan vivamente, se enriquecen— con esta nota el P. Giuseppe Testa ha concluido el encuentro celebrado la tarde del viernes en la “Sala degli Arazzi” del Colegio Alberioni, (Piancenza-Italia).

El evento, con el titulo “El carisma del teólogo en la Iglesia: perspectiva católica, evangélica y ortodoxa en contraste”, fue pensado para los estudiantes del Colegio Alberioni. Este año entre los alumnos nació la idea de profundizar algunos temas. De ahí surgió la propuesta: un ciclo de encuentros sobre la identidad del teólogo, proyectado por los estudiantes con el apoyo de los profesores. Para el segundo ciclo sobre el tema del ecumenismo —con la aprobación del delegado mons. Pierluigi Dallavalle entre las iniciativas de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos — fuero invitados el P. Nicola Albanesi, C.M. (profesor de dogmática), el pastor Nicola Tedoldi (de la Iglesia Valdo Metodista de Piacenza e Cremona) y el P. Curie Ursachi (sacerdote de la Comunidad Ortodoxa Rumana de Piacenza).

El carisma del teólogo es un don del Espíritu (cf. Rm 12). En la historia su papel se ha articulado en las diversas iglesias de modo diverso, de acuerdo a los tiempos y a las diversas experiencias.

Para resaltar la diversas posiciones, la comparación fue favorecida por un esquema de cuatro puntos ofrecidos a cada orador. Entre pastores y teólogos —desde la perspectiva católica expresada por el P. Albanesi— debe ejercitarse el diálogo, el papel de la teología es la investigación lingüística para encontrar los formas para profundizar en el depositum fidei, y transmitirlo fielmente, de manera comprensible, a la contemporaneidad. El pastor Tedoldi insistió en la primacía de la Escritura en el teología que es la conciencia crítica de la Iglesia. Su objetivo es el anuncio del Evangelio (para lo cual no se pueden separar la teología y la pastoral). Más fuerte parece el vínculo entre la teología y la vida espiritual en la perspectiva ortodoxa según el P. Ursachi: el teólogo es un “recipiente noble” de Dios: debe dar testimonio de la vida con Cristo —relación de la vida humana con la divina : no hablar “de Dios” sino hablar “con Dios”.

El diálogo entre los oradores y presentadores ha reavivado la segunda parte del encuentro, como prueba del interés que despierta una comparación de este tipo por su objeto intrínseco. Eso es una señal de que el camino del diálogo para la unidad entre los hermanos de fe en Cristo es transitable.

Giuseppe Porcari, estudiante del Colegio Alberoni

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