El Encuentro Mundial de la Juventud Indígena (EMJI) se realizó en la comunidad de Soloy perteneciente a la Comarca Ngäbe Buglé, Panamá a partir del día 17 al 21 de enero de 2019, pre jornada previa a la Jornada Mundial de la Juventud a realizarse en la Ciudad de Panamá.

El encuentro mundial de la juventud indígena contó con la representación de 40 pueblos originarios de 12 países con el objetivo de encontrarse con Cristo y tratar temas en común que están afectando actualmente a la juventud pero sobre todo a los pueblos originarios de cada país.

El encuentro llevó por lema “Asumimos la memoria del pasado para construir elfuturo con valentía”fue liderado por el P. José Fitzgerald C.M., Secretario Ejecutivo Nacional de la Pastoral Indígena en Panamá.  Fue una gracia especial participar en este encuentro y compartir con estos jóvenes. A pesar que no podíamos hablar el mismo idioma fue un pentecostés comprobado que solo el amor permite y facilita una fluida comunicación, sus testimonios conmovedores provocaron lasos fraternos permitiendo un conocimiento más amplio de las diferentes culturas de los pueblos indígenas. En el mensaje final realizado durante el encuentro por los jóvenes se hablan de la importancia de algunos temas:  La memoria viva de nuestros pueblos, La importancia de vivir en armonía con la Madre tierra y ser protagonistas en la construcción del otro mundo posible. En estos temas se refleja la esperanza de esta juventud.

Todo se realizó desde sus testimonios, en ambiente de encuentro, formación, oración, recreación, encuentro con la naturaleza.

Las Hermanas del Hogar de la Medalla Milagrosa en David Panamá, siendo consciente de que la mayor parte de la población beneficiada del hogar, es de los Pueblos Originarios, tomamos la iniciativa de llevar a un grupo de jóvenes Ngäbe-Buglé con la ayuda del personal que colabora en la institución, para que participaran y tuvieran la experiencia de encontrarse con sus hermanos indígenas, realzando sus costumbres, idioma y tradiciones, con un rostro de felicidad las jóvenes se sumaron a disfrutar  maravillosa experiencia.

Se recibió la bendición de Monseñor José Luis Cardenal Lacunza de la Diócesis de David, y la presencia del Padre Esteban, Visitador de la Provincia del Este de Estados Unidos retomando el mensaje del Papa Francisco donde invita a la juventud indígena a “hacerse cargo de las raíces, porque de las raíces viene la fuerza que los va hacer crecer, florecer y fructificar”. Los jóvenes reunidos en Panamá mostraron su alegría y satisfacción por las palabras del Santo Padre.

En el transcurso de los días los jóvenes compartieron sus “anhelos, sueños, esperanzas y dolores” en relación a las “numerosas violaciones a la dignidad de nuestros pueblos, las invasiones y explotación de territorios originarios”.

En ese sentido, pidieron proteger la Madre Tierra “para que todos los pueblos tengan vida y un futuro que ofrecer a las futuras generaciones debido a que en este mundo estamos entrelazados”.

Se realizaron juegos, los jóvenes podían hacer diversos recorridos por el área donde lograban plantar árboles, ir al Río, bañarse, venta de artesanías propias de su región entre otras actividades. Por las noches se culminaba la jornada con danzas, cantos, bailes, décimas, incluso tradujeron el Himno oficial de la Jornada en la lengua nativa ngäbere y lo interpretaron con instrumentos, ritmos y danza jegui.

El encuentro Mundial de la Juventud culminó con la misa celebrada por Monseñor Lacunza en conjunto con los Sacerdotes que acompañaban a las delegaciones de los diferentes países. Luego del EMJI los jóvenes se sumaron a la JMJ.

Agradecemos a Dios por tan importante iniciativa de Padre José Fitzgerald inspirada por el Espíritu Santo en la JMJ de Cracovia.

Y por tan eficiente desempeño en planificar y organizar en equipo con las diferentes instituciones y organizaciones de la localidad, ofreciendo atención, acogida, seguridad a todos los peregrinos y demás visitantes al evento.

Sor Cilia Varinia Cerrato G.
Hija de la Caridad