Después de una semana de reflexiones y discusiones enriquecedoras, los visitadores fueron invitados a disfrutar un fin de semana de descanso y recreación en la playa Pico de Loro en Nasugbu, Batangas a 109 km al sur de Manila. En la mañana, celebramos la Eucaristía en la capilla de Santa Teresa que se encuentra a un costado de la playa festejando la solemnidad de los santos Pedro y Pablo. La Eucaristía fue presidida por el P. Ferdinand Labitag, CM, visitador de la provincia de China. La fuerte lluvia que cayó no quitó nuestro ánimo, al contrario hizo que nuestra estancia en el lugar fuera una experiencia de convivencia más relajante y rejuvenecedora. Así, tuvimos la oportunidad de cantar, nadar, jugar billar y compartir deliciosa comida –se debe dar un agradecimiento especial a nuestros generosos bienhechores.

El domingo, tuvimos la mañana libre. Por la tarde, visitamos las Casas Vicentinas, proyecto para los pobres en Bangog Silangan, en Quezon City. El P. Gerald Borja, CM, director del VMSDFI (Fundación para el desarrollo social de los misioneros vicentinos), nos ilustró acerca del uso de la tecnología del bambú que es puesta en práctica en la construcción de las casas. Él considera que este proyecto es una respuesta concreta al reto del Papa Francisco en la “Laudato Si” que nos llama a tener cuidado del ambiente y advierte sobre la vulnerabilidad. Actualmente hay veinte casas ya construidas para familias que tienen niños con necesidades especiales o miembros ancianos. En el futuro inmediato se construirán treinta casas más. Para financiar este proyecto cuentan con la ayuda de la asociación de filantropía Spring Rain Global Consultancy. Al final, una de las personas que ha sido beneficiada compartió lo agradecido que se siente por la ayuda brindada por medio de este noble proyecto. Después, los visitadores fueron invitados a caminar por la aldea para visitar a las familias.

Al terminar, los visitadores fueron a la parroquia de Ina ng Lupang Pangako (Nuestra Señora de la Tierra Prometida), localizada en lo que era un basurero de trece hectáreas en Payatas, en Quezon City. Fueron invitados a tomar un café y, mientras esperaban el inicio de la Eucaristía, fueron deleitados por las voces hermosas de “Payatas Kids” un coral formado por estudiantes y maestros vicentinos. La Eucaristía fue presidida por el párroco, el P. Michael Sangada, CM. Después de la Eucaristía, subimos la colina del basurero que se ha transformado en un parque eco-amigable con árboles y plantas sembrados por doquier. Sorprende que en el área donde la basura era depositada se produce gas metano que se transforma en electricidad y se distribuye en la comunidad. Después de la foto del recuerdo nos dirigimos a la Casa de la Misión Vicentina en Tandang Sora, en Quezon City para disfrutar de la cena donde celebramos los aniversarios sacerdotales y los cumpleaños de algunos cohermanos. 

P. Raymundo Reguas, CM
Cronista
Provincia de Filipinas