A principios de abril, la Vincentian Solidarity Office, ‘VSO’, decidió hacer un estudio del impacto que la pandemia del COVID-19 ha tenido en los proyectos y los cofinanciadores.[1] Este breve estudio resume nuestras conclusiones sobre la respuesta a COVID-19 por parte de las agencias de financiamiento y sus socios locales, y los socios de VSO en el mundo en desarrollo. La lista de agencias de financiamiento se limita a las que proporcionan fondos para actividades católicas pastorales y sociales. La VSO analizó los datos de las páginas web, Twitter y Facebook de las agencias, e incluye la comunicación con los misioneros vicentinos, los financiadores y una oficina con una misión como la de la VSO. Este estudio de la VSO documenta lo siguiente: a) nuevas iniciativas de los organismos de financiamiento y cambios en las prioridades de financiamiento en respuesta a COVID-19; b) impacto de la pandemia en la cantidad y disponibilidad de financiamiento para los proyectos; y, c) nuevos desafíos para los socios locales y los gerentes de proyectos en países en desarrollo. La VSO no comparó el contenido actual de los medios de comunicación social con publicaciones anteriores. El período de tiempo de este estudio se extiende desde el 16 de abril hasta el 22 de mayo del 2020. El estudio sigue un orden cronológico de cuándo se accedió a las páginas web y se recibió otra información. Al final del estudio, el lector encontrará un resumen de las conclusiones y ofrecerá vías abiertas a los gerentes de proyectos sobre cómo avanzar la actividad de sus proyectos en la época de la pandemia. Comienzo con una encuesta sobre las actividades de recaudación de fondos de las agencias católicas de Europa y Estados Unidos.

Agencias católicas de financiamiento

El 6 de abril, la Conferencia Episcopal Italiana, CEI (https://www.chiesacattolica.it/), anunció un paquete de 6 millones de euros de ayuda a África. Se ofrecieron solicitudes a los socios para proyectos que equipen a los profesionales de la salud con equipo de protección personal, es decir, guantes y máscaras (PPE por sus siglas en inglés); la fecha límite para estas solicitudes era el 30 de abril. El 18 de mayo se anunció que se asignaron 3 millones de euros adicionales para ayudar a los países africanos; esto se utilizará para la salud y la educación. Los proyectos financiados deben ser completados dentro de los 3 meses de su desembolso.

El 16 de abril, el post de Missio Austria en Facebook indicó que su organización estaba solicitando donaciones para ayudar en Siria debido al coronavirus.

El 28 de abril, la VSO se puso en contacto con la Arquidiócesis de Colonia (https://www.erzbistum-koeln.de/) por correo electrónico. Recibimos una respuesta automática diciendo que estaban trabajando de manera muy limitada durante este tiempo de cuarentena.

Kindermissionwerk (https://www.sternsinger.de/) afirma que han creado un fondo de emergencia de un millón de euros; el 1 de mayo, la organización reveló que estaba en conversaciones con los socios sobre la mejor manera de ayudar; el 15 de mayo, el anuncio de la página web tenía este mensaje:

La vida cotidiana ha cambiado mucho para los niños de nuestros proyectos en todo el mundo debido a los toques de queda. Los niños no pueden ir a la escuela o a los proyectos. Muchos padres están sin trabajo y hay una creciente preocupación de que la familia no pueda ser alimentada. Además de las medidas de protección de los niños, nuestros socios se ocupan de las necesidades más urgentes de las familias: con paquetes de alimentos y artículos de higiene.

Kindermissionswerk describe entonces dos proyectos: 1) un proyecto en Colombia ayuda a 1500 niños con alimentos y ayuda psicológica; y 2) un socio local en Malawi distribuye productos de higiene, desinfectantes, suplementos nutricionales y alimentos a 1700 personas necesitadas.

La página web Aid to the Church in Need [Kirche in Not] (https://www.kirche-in-not.de/) hace frecuentes peticiones de donaciones para financiar auxilio  por el COVID-19. El 18 de mayo, la VSO identificó una página web de los socios de la agencia, ubicados en varios países, acerca del efecto pandémico del COVID-19. Los socios en Brasil informaron acerca de la difusión de desinformación sobre el verdadero impacto del virus y las formas de limitar la transmisión; en  Camerún, los asociados informaron que llevaban meses sin electricidad y que tienen un toque de queda; en la República Democrática del Congo, los asociados informan que los sacerdotes no reciben las donaciones de los domingos de las misas debido al cierre, y por lo tanto carecen de recursos para satisfacer sus propias necesidades básicas; en Chile, los asociados informan del temor generalizado a un colapso económico, a pesar de tener tasas de infección más bajas que la mayoría de los demás países. En otra página web, el VSO encontró lo siguiente:

El coronavirus tiene controlado al mundo. Los sacerdotes y religiosos se aseguran de que el cuidado pastoral y la caridad continúen durante este tiempo. El coronavirus afecta a la gente en guerra y en los países en desarrollo con particular severidad. A menudo, cuando se trata del cuidado de la salud, dependen del compromiso de la Iglesia; la Iglesia opera hospitales y hogares y provee a la población de alimentos siendo la atención pastoral lo primero siempre… Para aliviar los efectos de la pandemia de corona, KIRCHE IN NOT proporciona ayuda de emergencia a los sacerdotes y religiosos. La ayuda financiera apoya especialmente proyectos de ayuda en Oriente Medio, Europa Central y Oriental, América Latina, Asia y África.

Según los informes de múltiples socios, Aid to the Church in Need se centra en ayudar a los líderes de la Iglesia, a los sacerdotes y a los religiosos y religiosas para que continúen las actividades pastorales críticas. Los servicios esenciales de organización de las comunidades y los recursos ayudan a innumerables beneficiarios, especialmente en tiempos de la actual pandemia.

El sitio web de Adveniat (https://www.adveniat.de/) tiene algunos detalles sobre cómo el virus está afectando a las personas en los países en los que presta servicios (consultado el 16 de mayo del 2020). Los artículos individuales de los países de América Latina relatan cómo las personas se ven obligadas a elegir entre la protección contra el virus y la alimentación. En su página web, Adveniat anunció un fondo de 2,5 millones de euros:

«Las situaciones extraordinarias requieren medidas extraordinarias: Por eso la agencia Adveniat de ayuda a la América Latina, pone a disposición un fondo especial de 2,5 millones de euros para proyectos en el contexto de la pandemia del coronavirus», anunció la agencia de ayuda con sede en Essen. La organización de auxilio de América Latina ya había proporcionado en marzo una ayuda de emergencia de 100.000 euros; sin embargo, pronto quedó claro que la necesidad era inmensa, sobre todo porque la Iglesia provee a los pobres con alimentos básicos y ayuda médica y así está donde las agencias gubernamentales fallan o no existen en absoluto. «Agradezco a los obispos de América Latina que actuaron rápidamente desde el principio de la crisis del coronaviro y a diferencia de algunos políticos latinoamericanos- encontraron palabras claras y de advertencia», dijo literalmente el obispo adventista Overbeck. «La Iglesia actúa: En Argentina, los lugares de culto se están equipando con camas y equipo médico para prepararlos para el posible ingreso de personas, por ejemplo, de hogares de ancianos. Los hospitales de la Iglesia, la pastoral social en las parroquias, los numerosos religiosos y sacerdotes ayudan a la gente, especialmente a los marginados de la sociedad, por ejemplo a los sin techo», dijo el obispo Overbeck.» https://www.adveniat.de/presse/bilanzpressekonferenz/

El sitio web de Missio Aachen (https://www.missio.at/application/) tiene un mensaje dirigido a amigos y donantes en el que les informa que su trabajo continúa, que desean seguir en contacto aunque estén trabajando desde su casa, y les ruega que disculpen cualquier retraso debido a ello. Han puesto en marcha un Fondo Corona-Virus de 1,5 millones de euros para apoyar a los asociados en los proyectos de África, Asia y Oceanía. También se está debatiendo la necesidad de que la Iglesia en África y Asia atienda las necesidades esenciales en los casos en que el gobierno no atienda adecuadamente a sus ciudadanos.

La Fundación Raskob para Actividades Católicas tiene un mensaje en su sitio web (https://www.rfca.org/COVID-19-Resources) notificando que son flexibles en cuanto a los informes que le deben; sólo piden que se le mantenga informada. Luego pasa a dar una lista de recursos, (16 de mayo de 2020). En una reunión del 8 de mayo con la fundación, la VSO se enteró de que el financiador sigue recibiendo y financiando una variedad de proyectos tanto en Estados Unidos como en otros países.

Hasta el momento de este informe, el 22 de mayo, la Propagación de la Fe no había incluido ninguna referencia a la pandemia de COVID-19 en la actividad o financiamiento de sus proyectos.

Servicio de Proyectos Internacionales de las Hijas de la Caridad

El 15 de mayo, la Sra. Therese L. McFarland, directora de Desarrollo y Comunicaciones de los Servicios de Proyectos Internacionales de las Hijas de la Caridad informó al VSO lo siguiente:

En este momento, no tengo noticias de nuestros colaboradores en los lugares donde trabajamos sobre la respuesta de COVID-19. Aunque sí vi algo en FAMVIN (https://famvin.org/en/tag/coronavirus/), una respuesta coordinada a COVID, que tal vez quieras comprobar.[2] Nos hemos puesto en contacto con ellos, pero no hemos recibido respuesta todavía.

Sor Mary Louise Stubbs, D.C., directora ejecutiva también de los Servicios de Proyectos Internacionales de las Hijas de la Caridad, está buscando activamente financiamiento de donantes institucionales para proyectos sociales centrados en la alimentación de las personas y otras necesidades inmediatas, como la atención de la salud.

Oficina de Solidaridad Vicentina, VSO

En el período de esta investigación, la Oficina de la Solidaridad Vicentina ha estado en contacto con sus socios. Varios asociados de Asia y África informan de retrasos en la preparación de proyectos para su financiamiento debido a la limitación de las actividades. Varios proyectos de construcción se han visto obstaculizados por el cierre de oficinas gubernamentales, el cierre de empresas, la falta de materiales de construción que son importados y el aumento de los costos de la mano de obra. A principios de abril, un cofundador en el norte de Italia de un proyecto social en Etiopía se retrasó en transferir los fondos para el proyecto debido al cierre de bancos en el norte de Italia. Los misioneros vicentinos están trabajando para organizar las comunidades y utilizar los recursos disponibles para compartir con los pobres. En Costa Rica, un proyecto financiado recientemente de un vehículo para un seminario beneficia ahora a los que sufren de hambre mediante la recogida y distribución de alimentos a los ancianos pobres. En Tanzanía, un cohermano está trabajando en un proyecto de alimentar a personas allí en un campamento de cuarentena de escasos recursos para los infectados con COVID-19. Informa que hay muchos casos del virus allí, pero que su gobierno no lo está abordando. En la ciudad de Mysore, De Paul Apparels con la ayuda de la VSO preparó un proyecto para coser y distribuir 200.000 máscarillas protectoras de forma gratuita en 20 aldeas y el barrio bajo de Mysore.

Conclusión

En resumen, las actividades de los organismos de financiamiento, los Misioneros Vicentinos y la oficina de la VSO están adaptando las actividades de recaudación de fondos y la labor de los proyectos a las nuevas realidades de la pandemia mundial de COVID-19. Algunos organismos de financiamiento, como Ayuda a la Iglesia Necesitada (Kirche in Not), han centrado la recaudación de fondos en el auxilio de emergencia en beneficio de sacerdotes, religiosos y religiosas. Las actividades de los proyectos, como la construcción, se han retrasado debido al distanciamiento social y a los cierres selectivos de oficinas gubernamentales y empresas. A corto plazo, se dispone de fondos de emergencia y se han iniciado nuevos proyectos para el auxilio de COVID-19. Algunos financiadores dan prioridad a algunos de ellos, y todos los organismos esperan que los directores de proyectos demuestren que son conscientes de las repercusiones de COVID-19. Otros organismos de financiamiento, como la Fundación Raskob, siguen abiertos a una variedad de proyectos (reunión con la VSO, 8 de mayo de 2020). Los asociados de los organismos de financiamiento han identificado problemas como la disminución de la financiamiento de donantes privados en Europa y Estados Unidos, por ejemplo. No se sabe cuándo las donaciones volverán a su nivel anterior a la COVID-19. Por consiguiente, los datos reunidos por la Oficina Virtual de Estadísticas sugieren cuatro formas en que los administradores de proyectos pueden hacer avanzar la actividad de los mismos: 1) entrar la atención en proyectos de emergencia que se enfocan en las necesidades básicas de los dirigentes religiosos; 2) considerar la posibilidad de redactar un proyecto que beneficie a los afectados por COVID-19; 3) prever retrasos en la actividad y la financiamiento del proyecto; y 4) investigar las fuentes de financiamiento entre los organismos seculares que se asocian con iniciativas basadas en la fe.

Por el Rev. Gregory J. Semeniuk, C.M. y Regina Rossi

500 East Chelten Avenue
Philadelphia, Pennsylvania 19144
United States of America
VSO Números de teléfono:
+1 215-713-2432

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[1] El VSO es un servicio de la Congregación de la Misión a los Misioneros Vicentinos, que trabaja en el mundo en desarrollo, para ayudar con proyectos de evangelización y servicio a los pobres mediante actividades de recaudación de fondos dirigidas a donantes institucionales. Los autores del estudio, el Rev. Gregory J. Semeniuk, C.M. es el Director Ejecutivo, y Regina Rossi es la Asistente Ejecutiva.

[2] FAMVIN.ORG es una página web de la Familia Vicentina, es decir, congregaciones de religiosos y religiosas, asociaciones laicas y grupos de jóvenes que siguen el carisma de San Vicente de Paúl (+1660).