Vicencianos de todo el mundo dieron un paso  adelante para enfrentarse al reto de la COVID-19. Desde comedores sociales en Perú hasta la prevención la propagación del virus en los barrios informales de Filipinas u ofreciendo apoyo financiero y espiritual a los refugiados en Ruanda, los vicencianos respondieron al grito de los pobres en el momento más difícil.

Aunque la COVID-19 es un desafío enorme para los vicencianos y nuestros proyectos y servicios en todo el mundo, esto no es nada nuevo. Como nos recordó el padre Bob Maloney CM, el propio San Vicente de Paúl tuvo que enfrentarse a las pandemias de su tiempo, y nos enseñó que, sin importar qué, nunca debemos abandonar a los pobres, pero debemos tomar todas las precauciones razonables para proteger nuestra salud mientras servimos a los pobres en un momento como este.

La Alianza Famvin con las personas sin hogar no podía mantenerse a un lado, y la Campaña “13 Casas” se amplió para incorporar la respuesta vicenciana a la pandemia. Esta campaña ha albergado a cerca de 5 000 personas gracias a la colaboración entre las ramas de la Familia. Sabíamos que el sinhogarismo era un problema grave, pero que la COVID-19 y las medidas para contenerla empeorarían la situación.

Lanzamos un llamamiento de emergencia que ha recaudado más de 70 000$ durante las primeras semanas ¡pero necesitamos mucho más para apoyar todos los proyectos! Nuestro llamamiento está cubriendo iniciativas vicencianas en Angola, Bolivia, Ecuador, Etiopía, Ghana, Guatemala, Líbano, Madagascar, Perú (2 proyectos), Filipinas, República Dominicana, Rumania, Ruanda, Tanzania y Ucrania.

Los vicencianos han proporcionado alimentos, asistencia financiera y espiritual o equipos de protección a personas sin hogar, grupos vulnerables y trabajadores de primera línea. Estas iniciativas involucran un amplio abanico de ramas vicencianas, muchas de ellas trabajando en entornos muy difíciles.

Algunos proyectos ya  formaban  parte  de  la  Campaña “13 Casas”, como el de la Congregación de la Misión en el Líbano o “Color Esperanza” en Perú, que acoge refugiados venezolanos. Otros se unieron como resultado del llamamiento, como la iniciativa de la JMV en la República Dominicana o las de MISEVI en Angola y Bolivia.

Hemos estado compartiendo las historias de aquellos que han encontrado alivio gracias a este trabajo. Como Véronique, de 91 años, que vive en el campo de refugiados de Mahama en Ruanda, donde el capellán local, el padre Henri Matsinga CM (embajador voluntario de la FHA), le brinda apoyo espiritual y económico durante el confinamiento.

O Ihor, que se mudó a otra ciudad en Ucrania justo antes  de la cuarentena y no pudo encontrar un nuevo trabajo a tiempo. Depaul Ukraine lo ayudó a conseguir un trabajo y un refugio, y ahora ya piensa en alquilar un piso para reunir a su familia cuando termine el confinamiento.

En las próximas semanas y meses, a medida que retrocede la primera ola de la COVID-19, el número de personas sin hogar en todo el mundo podría dispararse. Solo en Estados Unidos un estudio pronostica un aumento de más del 45% en el próximo año debido a las consecuencias económicas de la cuarentena y la falta de redes de seguridad. Esto hará que los esfuerzos y la colaboración vicenciana sean más importantes que nunca.

Proyectos de la Campaña “13 Casas” que proporcionan ayuda por la COVID-19 (rojo); en curso (azul oscuro) o planificados (azul claro)

 

La COVID-19 también ha obligado al equipo y a la Comisión de la FHA a adaptarse, por lo que esta reunión
semestral se celebró virtualmente por primera vez desde el lanzamiento de la Alianza en 2017. La reunión también
nos sirvió para dar la bienvenida al nuevo miembro de la Comisión, el padre. Manny Ginete CM, de Filipinas, y
Ella Siney, que se unió al equipo en Londres

Conferencia de la FHA sobre refugiados y trata de personas

La Conferencia sobre Refugiados y Trata de Personas de 2020 de la FHA se llevará a cabo en Sevilla a finales de este año, a menos que la COVID-19 nos obligue a posponerla hasta la primavera de 2021. Como parte del esfuerzo de la FHA para construir capacidad global dentro de la Familia Vicenciana sobre sinhogarismo, la conferencia busca arrojar luz sobre la respuesta vicenciana a la situación que viven los refugiados, las víctimas de trata y los solicitantes de asilo.

Sevilla, el lugar de la conferencia, también es el hogar de un proyecto de la Campaña “13 Casas” llamado “Alma Vicenciana”. Proporciona un hogar a más de 50 mujeres refugiadas o migrantes, a veces acompañados de sus hijos. El objetivo es sacar y proteger a las mujeres de las redes organizadas de trata de personas. Además de proporcionar alojamiento  y  asistencia  material,  el  proyecto  consiste en inculcar autoestima y encontrar seguridad jurídica y orientación espiritual. Las mujeres reciben formación que les ayuda a hacer la transición a su nuevo hogar y a la forma de vida en España.

Una beneficiaria del proyecto, llamada Flore, huyó de Costa de Marfil a España después de haber sufrido años de abuso sexual, físico y emocional a manos de su esposo. Una vez en España, Flore encontró a la Familia Vicenciana y la casa de refugiados. Aquí, no solo encontró un lugar para quedarse, sino que también la oportunidad de aprender nuevas habilidades, encontrar empleo, una existencia segura y y quizás lo más importante de todo, un ambiente cariñoso.

El refugio es la viva muestra de que cualquier definición de sinhogarismo debe incluir a los refugiados; cuya importancia no puede subestimarse.

En Mateo 25, Jesús dice que aquellos a su mano derecha heredarán el reino porque cuando él era un extraño, lo recibieron. Confundidos, los justos preguntan a Jesús cuándo lo recibieron como un extraño. Jesús responde: “cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo”. Aquí, Mateo indica que los cristianos deberían ver a Cristo en todos los que se encuentran.

De hecho, los estudiosos sostienen que, en el Nuevo Testamento, “extraño” y “prójimo” son en realidad sinónimos y se usan indistintamente a lo largo de los Evangelios. Como tal, la Regla de Oro, “ama a tu prójimo como a ti mismo”, se refiere no solo a las personas que conoces, o las del mismo país que tú, nuestros “vecinos” en el sentido tradicional, sino también a las personas que no conoces, de fuera de su pueblo, ciudad, país o cultura.

El propio San Vicente lo reconoció.  Durante  las guerras  en Lorena, trabajó para encontrar refugio para miles de personas desplazadas. Uno de sus asistentes, el hermano Mathieu Regnard, cruzaba regularmente las líneas enemigas para entregar dinero de San Vicente para el alivio de aquellos en zonas de guerra. En su viaje de regreso, a menudo traía a la gente que había encontrado en circunstancias extremas, y él y San Vicente los alimentaban y alojaban.

Cuando escuchamos historias como ésta del trabajo de San Vicente hace cuatro siglos,  se asemeja mucho al trabajo de la Familia Vicenciana hoy, y experiencias como la de Flore. Está claro hasta qué punto su legado ha continuado tanto en la práctica, a través de nuestro trabajo, como en el pensamiento, en la conferencia de este año.

Primera resolución de la ONU sobre sinhogarismo

A principios de febrero, antes de que la COVID-19 detuviera el mundo, las Naciones Unidas adoptaron la primera resolución que define el sinhogarismo, después del primer debate sobre el tema en una generación. La resolución incorpora todas las categorías clave de personas sin hogar del Marco del Instituto Global de Sinhogarismo (IGH por sus siglas en inglés, nuestro socio). La ONU sigue trabajando a pesar de la pandemia, y se espera que el Consejo Económico y Social adopte la resolución en breve, para luego pasar a la Asamblea General más adelante.

La resolución pide a los estados miembros por escrito que armonicen la medida del sinhogarimo y la recolección de datos. También refuerza el rol de la Comisión de Estadística de la ONU y subraya “la necesidad de hacer esfuerzos conjuntos para identificar a las personas que experimentan sinhogarismo.

La resolución fue adoptada al final de la 58ª reunión de la Comisión de Desarrollo Social, centrada en la viviendas asequibles y pisos de protección social para que todos para abordar la falta de vivienda. La incidencia vicenciana ha jugado un papel vital en la introducción del sinhogarismo en la Agenda de la ONU. Los esfuerzos del Grupo de Trabajo de ONG para Acabar con el Sinhogarismo lo hicieron posible. El Grupo de Trabajo, creado por la Familia Vicenciana, agrupa a organizaciones de todo el mundo. Hasta el momento, había estado coordinado por  el padre Memo Campuzano CM.

La Alianza Famvin y nuestros socios Depaul International y el IGH también son miembro, y juntos han impulsado la campaña “Haznos contar” (Makes us Count). Nuestro objetivo a largo plazo es introducir el sinhogarismo en los próximos Objetivos de Desarrollo Sostenible en 2030.

La Familia Vicenciana avanza

Las integrantes del equipo de la FHA, Natalie Monteza y Yasmine Cajuste (izquierda) y los asistentes con el Papa Francisco.

Del 8 al 12 de enero de 2020, más de 200 líderes de la Familia Vicenciana, representando a 91 ramas, se reunieron en Roma (Italia) para reflexionar sobre las realidades de la colaboración y el futuro del Carisma Vicenciano.

Este evento fue único en muchos sentidos.  Fue  el  primer Encuentro Internacional de Líderes de la Familia Vicenciana, que reunió a los 150 superiores generales     y los presidentes de las ramas vicencianas de todo el mundo. Para algunos superiores generales, fue la primera ocasión de comprender mejor la gran Familia Vicentina  y explorar múltiples posibilidades de colaboración. Para todos, fue una oportunidad muy especial para reflexionar con otros sobre las esperanzas y desafíos compartidos con respecto a las vocaciones, la transmisión del carisma y las comunicaciones, entre otros temas. Este evento fue posible gracias a la labor de la Oficina de la Familia Vicenciana

Las integrantes del equipo de la FHA, Natalie Monteza y Yasmine Cajuste (izquierda) y los asistentes con el Papa Francisco.

(VFO por sus siglas en inglés), que cuidadosamente contactó y visitó las diferentes ramas en el último año para tener una mejor idea de las múltiples manifestaciones del carisma en todo el mundo.

La Alianza Famvin con las personas sin hogar tuvo la bendición de estar presente en este evento histórico de    la Familia. Mark McGreevy, Coordinador de la FHA, y la hermana Carol Keehan HC, integrante de la Comisión, presentaron el trabajo de la Alianza y la Campaña de las 13 Casas. Mark McGreevy dijo: “Fue genial estar en esta reunión histórica de todos los líderes de las ramas de la Familia Vicentina. El espíritu vicenciano está vivo, y tengo grandes esperanzas de  una  colaboración  sustancial  en el futuro”. A integrantes del equipo de la FHA, Yasmine Cajuste, coordinadora de desarrollo de proyectos, y Natalie Monteza, coordinadora de la Campaña “13 Casas”, también asistieron a esta reunión histórica, que les permitió establecer la semilla de prometedores proyectos de la Campaña “13 Casas” en muchas partes del mundo.

Esperamos los frutos de esta reunión y esperamos que    la Familia Vicenciana manifieste la audaz osadía, la inspiración profética y el sentido de colaboración de sus fundadores al abordar los signos de los tiempos en su quinto centenario.