A medida que la guerra en Ucrania continúa, también lo hacen las tragedias que se derivan de ella: desplazamientos, hambre, falta de acceso a necesidades médicas, y la lista sigue interminable.

Como ha dicho el papa Francisco: «en ese país martirizado la necesidad de ayuda humanitaria crece cada hora». La Familia Vicenciana está haciendo una serie de esfuerzos coordinados para ayudar a los afectados por esta calamidad.

Por favor, considere donar generosamente a cualquiera de las iniciativas vicencianas indicadas en el siguiente folleto: