“El Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir a los demás” (Mt 20,28).
La propuesta de forma de vida en La Congregación de la Misión es una posibilidad de “… ir, no a una parroquia, ni tampoco solamente a una diócesis, sino a toda la tierra. ¿Y para hacer qué? Para inflamar los corazones de los hombres, haciendo lo que hizo el Hijo de Dios, Él, que vino a traer fuego al mundo para inflamarlo con su amor “(SVP. Conferencia del 30 de mayo, 1659).
- Misiones Populares
- Parroquias
- Santuarios de peregrinos
- Seminarios y formación del clero
- Misiones Ad Gentes
- Misión continuada
- Hijas de la Caridad (Directores, capellanes)
- Escuelas (primarias, secundarias, superiores, profesionales)
- Comunicaciones sociales (publicaciones, radio, televisión)
- Estudios especiales
- Capellanes (hospitales, inmigrantes, asociaciones, militares)
- Capellanes (Grupos Laicales Vicentinos)
- Servicio directo a los pobres
Misiones populares
Las Misiones Populares son un aliento de fe, un signo de solidaridad y una buena ayuda para el fortalecimiento de las comunidades. Ir hasta donde la realidad de los hombres y mujeres necesita el anuncio de la Buena Nueva.
Es una significativa y característica actividad de la Familia Vicentina que con el liderazgo de la Congregación de la Misión y las Hijas de la Caridad llegan hasta las periferias, y entre los más pobres de los pobres se acercan, escuchan, viven y comparten intensamente las enseñanzas de la Palabra de Dios.
Parroquias
La parroquia es la expresión de la comunidad eclesial en la que se congrega y sirve a los fieles estando y viviendo en su propia realidad. La Congregación de la Misión está al servicio de miles de fieles en todo el mundo animando los ministerios laicales y llevando a cabo la misión del anuncio a los pobres.
Más de 1000 ministros entre Obispos, Sacerdotes, Diáconos y Hermanos de la Congregación de la Misión lideran proyectos de vida cristianos en parroquias insertadas en las más complejas realidades de nuestros tiempos.
Santuarios de peregrinos
La Oración y la contemplación del Misterio de Cristo son la firme plataforma desde la cual animar cualquier acción y vocación en favor de los pobres. La Congregación de la Misión sirve en diferentes Santuarios Marianos y de otras devociones que congregan a miles de peregrinos durante todo el año. Desde allí el anuncio de Cristo Salvador de la humanidad y consolador de los más necesitados es el sello característico del Servicio y la misión.
Medio centenar de sacerdotes de la Congregación de la Misión sirven hoy por hoy en este ministerio.
Seminarios y formación del clero
“Los buenos sacerdotes son el mejor tesoro de la Iglesia”. “¡Qué tarea más importante! ¡Qué sublime! ¡Cuán por encima de nosotros!” San Vicente de Paúl
La formación de sacerdotes estuvo desde tiempos de San Vicente en las prioridades de la Congregación “…cuando llegó la plenitud de los tiempos, nos llamó a que contribuyéramos a formar buenos sacerdotes, a dar buenos pastores a las parroquias y a enseñarles lo que tienen que saber y practicar”. (SV XII,83-84 / ES XI, 390).
San Vicente escribió que la Congregación tiene dos fines principales: la instrucción de la pobre gente del campo y la formación del clero (SV III, 273 / ES III, 251). Hoy sigue siendo tarea prioritaria en el ejercicio de nuestros ministerios la formación de sacerdotes, sirviendo como formadores más de 220 sacerdotes en seminarios propios y de las iglesias particulares en todas las provincias en las que estamos presentes.
Hace parte del estilo de vida de la Congregación de la Misión organizar centros de formación permanente para sacerdotes, ofrecerles la posibilidad de hacer los ejercicios espirituales anuales en nuestras casas, darles la posibilidad de confesarse, interesarse por los sacerdotes ancianos, enseñar en los seminarios, colaborar fraternalmente con el clero de la diócesis tomando parte en las diversas iniciativas.
Misiones Ad Gentes
“¿Estás dispuesto a manchar las manos en el servicio a los pobres?” P. Tomaž MAVRIČ. Superior General de la Congregación de las Misión
Las misiones son como un campo donde los mensajeros trabajan para Dios. Es un terreno difícil, donde la cosecha es de gran valor, solo porque es difícil. “El que ama no se queda en un sillón mirando, esperando el advenimiento de un mundo mejor, sino que con entusiasmo y sencillez se levanta y se va. Lo decía muy San Vicente: Por tanto, nuestra vocación es ir, no a una parroquia, ni tampoco solamente a una diócesis, sino a toda la tierra” SS Francisco.
Las Misiones Ad Gentes es uno de los ministerios que con mayor decisión impulsan las vocaciones y entrega dentro de la Congregación y en general en la Familia Vicentina. Un llamado que desde el Evangelio invita a dejarlo todo por el anuncio firme del nuevo mandamiento y el servicio a los pobres. Cerca de 200 miembros de la Congregación de la Misión han sido enviados a diferentes lugares del mundo desde donde diariamente nos entregan su testimonio de compromiso y amor.
Hijas de la Caridad (Directores, capellanes)
Vicente de Paúl fundó y dirigió a las Hijas de la Caridad en 1633 en compañía de Luisa de Marillac. Como miembros de una misma familia y compartiendo el mismo carisma de servicio a los pobres que impulsó toda la obra de San Vicente, siguen actualmente, siendo el servicio a las Hijas de la Caridad uno de los ministerios que con gran dedicación desarrollan los sacerdotes y otros miembros de la Congregación de la Misión.
Obrar como directores y guías espirituales es labor prioritaria de la Congregación en cada lugar donde existe una Provincia de la Compañía de las Hijas de la Caridad.