Del 18 al 27 de enero se llevó a cabo la visita del P. Tomaž Mavrič cm, y del P. Aarón Gutiérrez cm.

Durante estos días visitó las tres casas o comunidades locales que tiene la Región: el Santuario de la Merced, en plena Habana Vieja; la Parroquia La Milagrosa, en el municipio de Diez de Octubre y la parroquia misionera San Joaquín, ubicada en la Provincia oriental de Santiago de Cuba.

Durante la visita se llevó a cabo importantes y emotivos encuentros, con los fieles que atendemos, con los miembros de la Familia Vicentina y los consejos parroquiales, las Hijas de la Caridad, los obispos en cuyas Iglesias particulares hacemos presencia.

Destacamos, de la parte oriental las celebraciones dominicales del día 21 de enero con las comunidades de San Luís y Mella, la visita al Santuario Nacional de la Virgen del Cobre, Patrona de Cuba, el encuentro y almuerzo con arzobispo de Santiago de Cuba y parte del presbiterio que de costumbre se reúne los lunes a almorzar en la casa arzobispal, y además hubo tiempo para visitar la tumba de los cohermanos y las Hijas de la Caridad en el Cementerio Santa Ifigenia o Efigenia como se llamó en sus orígenes. Oramos por los cohermanos que yacen allí y por todos los cohermanos que terminaron su misión en la tierra sirviendo a los pobres en esta isla. El traslado desde la Habana hasta Santiago de Cuba fue oportunidad para conocer la bella geografía de la isla caribeña así como deducir su decadente situación.

El día 25 de enero, aniversario de Fundación de la Congregación se celebró la Eucaristía en el santuario de la Merced junto a toda la Familia Vicentina de la Habana. Cabe destacar la apertura de los 400 años de la Pequeña Compañía, como la llamó San Vicente. Este mismo día hizo los buenos propósitos el único estudiante que tiene la Región, y que ha hecho su Seminario Interno junto a Clapvi norte en Santo Domingo, República Dominicana. Será Dios mediante una vocación para hermano dentro de la CM.

Se destaca los diálogos personales con los cohermanos que trabajamos aquí y que ya sumamos de cuatro nacionalidades: 5 cubanos, un mexicano, un filipino que hace pocos meses llegó y los dos colombianos. Recordemos que la Provincia de Colombia ha venido ayudando ininterrumpidamente con varios cohermanos desde comienzos de la década de los 90.

También hay que decir, en honor a la verdad, que el motivo de la visita incluía el estudio y evaluación de los Estatutos de la Región que estaban para tres años, pero que la apretada agenda no se prestó en su totalidad para el estudio y la reflexión como puntos esenciales de la consolidación del caminar congregacional en esta iglesia necesitada de Cuba, quedando como compromiso abordar durante el presente año dicha reflexión e introducir los cambios pertinentes en los estatutos así como el nuevo plan pastoral para el próximo trienio y las respectivas normas regionales.

La visita terminó con dos encuentros dignos de resaltar, el primero con la responsable de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, sin ningún comentario al respecto. El segundo, con el Cardenal de la Habana, Juan de la Caridad. Así se llevó a cabo, a grandes rasgos y sin mayores detalles, la visita del Sucesor de San Vicente. Algunos afirman que los últimos cuatro superiores generales han visitado Cuba, al menos de los tres últimos hay evidencias y memoria resiente. De mi parte no tuve tiempo para visitar los archivos de la otrora Provincia, hoy Región de Cuba.

Termino diciendo que la visita se dio en un momento muy difícil y crítico por el que traviesa Cuba debido a la crisis social, política y económica por la que atraviesa el país en sus 65 años de historia revolucionaria. Como iglesia no nos queda que seguir acompañando al pueblo y orando para que, en algún momento cambie la situación, y que, lo que los cubanos buscan en otras partes emigrando, lo encuentren aquí en su propia tierra.

P. Héctor Manuel Farfán Murte cm